lunes, 1 de agosto de 2016

El baúl de mis padres

¡Hola!

Si hay algo que me llena de felicidad es haber heredado algo que tiene un significado muy especial para toda la familia. Estoy hablando de un baúl protagonista del post de hoy que fue un regalo de la boda de mis padres, hace más de 50 años. Mi padre, que en paz descanse, y mi madre emprendieron entonces un viaje a Francia en busca de trabajo para sobrevivir a la penuria que estaban viviendo en España. Éste baúl les acompañó hasta allí lleno de enseres y hoy de nuevo, regresa a España para ocupar un nuevo rincón de mi casa. Aunque ha sido transformado en cuanto a colores, siempre me quedará el recuerdo de su estado original a través de las fotografías y en el corazón. Espero que la nueva versión os guste, el baúl seguirá siendo un regalo con un gran valor sentimental tenga el color que tenga.


EL BAÚL ORIGINAL



El primer paso ha sido retirar todas las puntas y el papel del interior del mueble que estaba bastante deteriorado. Por precaución he dado dos manos de quitacarcoma a toda la madera
 .



El siguiente paso ha sido empezar a pintar con pintura acrílica el exterior con los colores que me gustaban en éste caso un blanco roto "cáscara de huevo", sí, así se llama! y un color avellana.




El cierre y las asas se han pintado de rojo óxido para darle un pequeño toque rústico.




En las partes que antes eran de chapa de color verde y amarillo, he recortado un papel decorativo con unos tonos acorde.






Pasamos al interior, y ésta vez he recuperado el restante de una tela que había utilizado en un trabajo anterior (banco pequeño con caja de vino). Los tonos me encajaban perfectamente!! así que ultimando mi trabajo que ya estaba ansiosa de ver acabado!!




Y por fin el trabajo terminado, espero que os guste. A mi madre le ha encantado!!!! Y mi hija ya deja descansar allí su oso gigante!!







¡MUCHAS GRACIAS!













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